El 30 de junio, en España, se cumplía 15 años desde que se aprobó el matrimonio igualitario, lo que convertiría a este país en uno de los pioneros que logró reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo, justo después que lo hicieran los países como Canadá, Bélgica y Países Bajos.
Europa
Por otro lado, un país que se suma también a favor del matrimonio igualitario es Costa Rica, el cual, es uno de los países que recientemente ha legalizado el matrimonio entre parejas del mismo sexo, considerándose el único país perteneciente a América Central que lo haya hecho. El concepto de matrimonio igualitario ha ido ganando lugar en regiones y países donde se cuenta con un nivel de aceptación a la homosexualidad, muy alta y en cuanto a nivel mundial, dos tercios de los países ya permiten este tipo de matrimonio, donde se puede considerar a Europa Occidental.
Sin embargo, es importante mencionar que existen varios gobiernos de Europa que aún no están de acuerdo y no están a favor del matrimonio igualitario, Italia y Suiza son dos ejemplos particulares, según Pew Research. Sudáfrica sigue siendo considerado el único país en el continente africano en permitir la unión entre dos personas del mismo sexo, mientras que en Europa Central y Oriental aun no existen países que lo hayan hecho.

América Latina
En cuanto a América Latina, uno de los primeros países en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo fue Argentina (2010), donde tras una reñida y larga votación del Senado argentino, que tras treinta y tres votos a favor, veintisiete votos en contra, tres abstenciones y nueve senadores ausentes, finalmente se pudo dar la aprobación del proyecto de ley que fue criticado por la jerarquía de la Iglesia católica e Iglesia evangélica quienes consideraron dicho proyecto como un “plan del demonio”.
Como era de esperarse se dio un gran número de manifestaciones en contra del matrimonio de parejas del mismo sexo que principalmente fueron promovidas por la Iglesia católica , quienes recorrieron las principales calles de la ciudad de Argentina y la mayor parte de sacerdotes impulsaron a sus fieles para que ellos presionen a los senadores para que brinden una respuesta negativa acerca de la aprobación del proyecto de ley. Es importante resaltar la participación de la senadora Norma Morandini, quien es la representante de Córdoba, que pidió a los ciudadanos que entendieran que los debates giraban alrededor de la lucha de los derechos humanos de esta comunidad y que no tendría nada que ver las creencias tanto religiosas como políticas. Otro senador que también sobresalió durante esta temporada de elección de este proyecto de ley fue Luis Juez, quien afirmó que sí votaría a favor y comentó “al día siguiente seguiría siendo el mismo tipo cristiano y fanático de la Virgen” con lo que quiso referirse a que el tema central por el que se discutía era un tema de igualdad frente a la ley y que es ajeno a cualquier tipo de consideraciones. Sin embargo, muchas de las personas que conforman las filas de los radicales proponían rechazar el proyecto del matrimonio entre personas de mismo sexo y que solo se pondría considerar un nuevo tipo de unión civil que no sea denominado matrimonio y que les permitiera a las parejas homosexuales la posibilidad de adopción, tal y como sucede en el país vecino, Uruguay.

Muchos países en diferentes continentes han ido promoviendo proyectos de ley a favor del matrimonio igualitario pero no todo siempre resulta tener un desarrollo sin trabas ni manifestaciones por parte de la sociedad. Sin embargo, es gratificante que existan personas a favor de la comunidad LGTB que buscan defender sus derechos en sus países y que promueven la aceptación de la unión de dos personas de manera legal, sin importar el sexo y puedan contar con la capacidad de adoptar sin tener la necesidad de pasar por un largo camino de criticas porque al final de todo, todos tenemos derecho a ser felices y vivir el amor de manera libre.